Contexto
Las lluvias del fin de semana pasado trajeron consigo devastadoras inundaciones en la zona central de Chile, con las regiones de O'Higgins, Ñuble, Bio-Bio y Metropolitana fuertemente afectadas. Pero sin duda, la región más golpeada por esta catástrofe ha sido la región del Maule.
El valle del Mataquito y sus habitantes fueron los que mayormente sintieron la furia de la crecida de un caudal, donde el río Mataquito se desbordó a tal punto que el pueblo de Licantén (su centro histórico) quedó en un 80% bajo el agua según la actual ministra del interior y seguridad pública del viejo Estado, Carolina Tohá
Otras localidades cercanas a la corriente fluvial que vieron sus casas, siembras, animales, fardos y vehículos bajo el agua fueron sectores predominantemente rurales como Calpún, Lora, Placilla e Idahue (comuna de Licantén), Paula, Docamávida, Domulgo y Curepto (comuna de Curepto), cercanías del Puente Paula, El Molino (comuna de Hualañé), Majadilla y Palquibudis (comuna de Rauco) entre otros.
Plaza de armas de Licantén y la estatua del poeta comunista revolucionario Pablo de Rokha inundados |
Las masas resisten y solidarizan
Campos, rutas y vehículos completamente destruidos |
En varias de estas iniciativas también se hacen presentes las fuerzas comunistas y revolucionarias que hacen suya la consigna "servir al pueblo de todo corazón" y están aportando tanto con organizar parte de estas campañas como sumándose a otras iniciativas que las propias masas impulsan. Con los pies en el fango se han volcado a las tareas de limpieza en viviendas que vieron como el agua arrasó con todas sus cosas, dejando a familias enteras sin alimentos, sin ropa, sin electrodomésticos, muebles, es decir, sin nada.
Las masas volcadas a tareas de ayuda. Foto Periódico Iloca |
La lucha contra el oportunismo y el viejo Estado
Los organismos estatales tratan de canalizar las ganas de ayudar de las masas levantando centros de acopio de víveres y otros insumos, los que se supone deben repartir entre las personas afectadas. Este mismo modo de operar se ha visto en catástrofes anteriores como el terremoto del 2010 y los megaincendios forestales de 2017. En esas ocasiones (al igual que en esta oportunidad), las propias masas denuncian que los funcionarios municipales se reparten entre ellos mismos la mejor ropa y mejores elementos donados por el pueblo a la vez que prefieren botar al río alimentos perecibles y otros pertrechos antes que distribuirlos entre la población. Y cuando hacen los repartos siempre aseguran primero a sus familiares, amigos o cercanos que, suele coincidir que no son precisamente los más golpeados por la catástrofe ni tampoco parte de los más pobres.
En el caso de la participación de las Fuerzas Armadas y las policías, se reiteran las denuncias sobre el poco trabajo de ayuda en fuerza bruta que éstas han aportado. No se les ha visto paleando barro, moviendo cosas o ayudando a las masas (al menos no en la magnitud que se requiere) y principalmente se han volcado a "resguardar el orden público". La prensa ha cubierto algunos rescates que suelen ser más anecdóticos que frecuentes y el pleno respaldo que le ha dado el poder ejecutivo con el oportunista Gabriel Boric a la cabeza demuestran el caracter de clase del Estado que mantiene el viejo orden a favor de los ricos y en desmedro de los pobres. He aquí la consigna a levantar de "Milicos con palas y no con fusiles" y "Boric mentiroso y ladrón".
Pero no sólo el Estado y los municipios estan incurriendo en tan nefastas acciones. En medio de la tragedia distintas individualidades han buscado aprovecharse, principalmente de las manifestaciones de ayuda solidaria que las masas están desarrollando. Las denuncias que más se repiten son las de personas que engañan y se hacen pasar por damnificados cuando no lo son para que les entreguen insumos. También se registra el robo y acaparamiento de agua, de comida y alzas inescrupulosas de precios como el alza en los sacos de papas que llegan a costar entre $18.000 a $21.000 pesos.
Otra problemática que se viene detectando es el uso de la "ayuda humanitaria" con fines electoreros donde concejales, alcaldes, seremis y distintos funcionarios del gobierno y posibles candidatos a futuros cargos políticos cooptan ayudas y las reparten entre las familias, no sin antes sacarse la foto sonrientes y recalcando que tal o cual fulano fue "el que ayudó".
En la misma línea, aunque en otro grado, está el problema de quiénes por mero ego buscan sacarse fotos realizando (o derechamente actuando) tareas de voluntariado, o haciendo "turismo" al ir a las zonas afectadas para subir a sus redes sociales el "como aportan" hoy, y mañana se olvidan del problema. Por lo demás, este tipo de "figurones" muchas veces exponen a quiénes lo han perdido todo sólo para llenar su sentimiento egoísta. ¡Debemos combatir plenamente contra estas actitudes!
El oportunista Gabriel Boric |
¡Sólo el pueblo ayuda al pueblo!
Las tareas de limpieza y reparto de insumos continúa. Las masas con toda su creatividad están desarrollando cientos de iniciativas de apoyo lo que demuestra un excelente estado de salud en el sentimiento de ayudar a la clase, en especial a los campesinos pobres que abundan en el valle del Mataquito y que suelen ser ellos y sus familias las que más sufren con las actuales inundaciones.
La próxima semana se avecinan lluvias, lo que podría agravar la actual situación, como también las enfermedades por el agua insalubre, la basura que se acumula en las calles, campos y el frío del invierno que recién comienza.
Con todo lo anterior, lo que deben hacer comunistas, revolucionarios y demócratas reales es seguir desplegando las iniciativas solidarias y de apoyo mutuo, combatiendo a los oportunistas y al viejo Estado en sus intereses mezquinos y electoreros.
El llamado es que quiénes quieran ayudar que lo hagan directamente a las familias y no por medio de los centros de acopio dispuestos por municipalidades u organismos estatales.
Considerar formar grupos de emergencia sanitaria, impulsar a que los funcionarios de la salud apoyen y exigir que los municipios entreguen lo que han acaparado, sobre todo a los más pobres y afectados
Se debe luchar permanentemente por la reposición de los servicios de electricidad y agua potable lo antes posible y no permitir que se acaparen las donaciones ni que se suban los precios de alimentos e insumos básicos.
¡DEFENDER LA VIDA DE LA CLASE Y EL PUEBLO!
¡VIVA LA SOLIDARIDAD DE LAS MASAS!
¡ABAJO LOS ACAPARADORES Y SINVERGÜENZAS QUE LE ROBAN AL PUEBLO!
Algunas fotos que circulan en redes sociales sobre los efectos de las inundaciones en la región del Maule y valle del Mataquito:
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